1. Del Señor es la tierra y lo que contiene, el mundo y todos sus habitantes;

2. pues él la edifició sobre los mares, y la puso más arriba que las aguas.

3. ¿Quién subirá a la montaña del Señor? ¿quién estará de pie en su santo recinto?

4. El de manos limpias y de puro corazón, el que no pone su alma en cosas vanas ni jura con engaño.

5. Ese obtendrá la bendición del Señor y la aprobación de Dios, su salvador.

6. Así es la raza de los que Le buscan, de los que buscan tu rostro, ¡Dios de Jacob!

7. ¡Ea puertas, levanten sus dinteles, elévense, portones eternos, y que pase el Rey de la gloria!

8. ¿Quién es ese Rey de la gloria? El Señor, el fuerte, el poderoso, el Señor, valiente en la batalla.

9. ¡Puertas, levanten sus dinteles, elévense, portones eternos y que pase el Rey de la gloria!

10. ¿Quién es ese Rey de la gloria? Es Yahvé, Dios de los Ejércitos, él es el Rey de la Gloria.





“Que Maria sempre enfeite sua alma com as flores e o perfume de novas virtudes e coloque a mão materna sobre sua cabeça. Fique sempre e cada vez mais perto de nossa Mãe celeste, pois ela é o mar que deve ser atravessado para se atingir as praias do esplendor eterno no reino do amanhecer.” São Padre Pio de Pietrelcina