1. De David. Salmo. Celebraré con un canto la bondad y la justicia: a ti, Señor, te cantaré;

2. expondré con sensatez el camino perfecto: ¿cuándo vendrás en mi ayuda? Yo procedo con rectitud de corazón en los asuntos de mi casa;

3. nunca pongo mis ojos en cosas infames. Detesto la conducta de los descarriados y no los cuento entre mis amigos;

4. la gente falsa se aparta de mí y nunca apruebo al malvado.

5. Al que difama en secreto a su prójimo lo hago desaparecer; al de mirada altiva y corazón soberbio no lo puedo soportar.

6. Pongo mis ojos en las personas leales para que estén cerca de mí; el que va por el camino perfecto es mi servidor.

7. No habita dentro de mi casa el hombre traicionero; la gente mentirosa no puede permanecer delante de mi vista.

8. Hago desaparecer día tras día a los malvados del país, para extirpar de la Ciudad del Señor a todos los que hacen el mal.





“Quanto maiores forem os dons, maior deve ser sua humildade, lembrando de que tudo lhe foi dado como empréstimo.”(Pe Pio) São Padre Pio de Pietrelcina