Encontrados 331 resultados para: lista de pueblos
Moab será exterminado de entre los pueblos, por haberse levantado contra el Señor. (Jeremías 48, 42)
Pues mira, yo te he hecho pequeño entre los pueblos, despreciable entre los hombres. (Jeremías 49, 15)
Pues ved que yo suscito y lanzo contra Babilonia una coalición de grandes pueblos, que llegan del norte. Caerán sobre ella, y por allí será conquistada. Sus flechas, como de expertos guerreros, no caerán en el vacío. (Jeremías 50, 9)
Alzad bandera por la tierra, tocad la trompeta entre las naciones, preparad pueblos contra ella, convocad contra ella a los reinos de Ararat, Miní y Asquenaz; enviad contra ella el oficial de reclutamiento, lanzad los caballos como nube de langostas erizadas. (Jeremías 51, 27)
Esto dice el Señor omnipotente: La ancha muralla de Babilonia será totalmente arrasada y sus altas puertas consumidas por el fuego. Así los pueblos se fatigan por nada y las naciones se cansan para el fuego. (Jeremías 51, 58)
Sión alarga sus manos, mas no hay quien la consuele. El Señor ha suscitado contra Jacob por todas partes enemigos; Jerusalén se ha convertido en objeto de horror entre los pueblos. (Lamentaciones 1, 17)
Pero el Señor es muy justo, porque yo me rebelé contra sus leyes. ¡Oh, escuchad, pueblos todos, y mirad mi dolor; mis doncellas y mis jóvenes han marchado al destierro! (Lamentaciones 1, 18)
Basura y escarnio nos has hecho en medio de los pueblos. (Lamentaciones 3, 45)
Además, el Señor los entregó en manos de todos los reinos de alrededor para que fuesen objeto de oprobio y maldición entre todos los pueblos de los contornos, donde el Señor los dispersó. (Baruc 2, 4)
no a pueblos numerosos de lengua oscura e incomprensible, cuyas palabras no entenderías; si a ellos te enviara, te escucharían. (Ezequiel 3, 6)
Yo haré venir a los pueblos más feroces, que se apoderarán de sus casas. Humillaré la soberbia de los poderosos y sus santuarios serán profanados. (Ezequiel 7, 24)
Y no sucederá lo que pasa por vuestra mente, cuando andáis diciendo: ¡Seremos como las gentes, como los pueblos de los otros países, adoradores del leño y la piedra! (Ezequiel 20, 32)