Encontrados 451 resultados para: Fuego

  • El día en que se erigió la Morada -la Carpa del Testimonio- la nube la cubrió, y desde el anochecer hasta la mañana estuvo sobre ella con aspecto de fuego. (Números 9, 15)

  • Así sucedía siempre: la nube cubría la Morada y de noche tomaba el aspecto de fuego. (Números 9, 16)

  • Una vez, el pueblo se quejó amargamente delante del Señor. Cuando el Señor los oyó, se llenó de indignación. El fuego del Señor se encendió contra ellos y devoró el extremo del campamento. (Números 11, 1)

  • El pueblo pidió auxilio a Moisés. Este intercedió ante el Señor, y se apagó el fuego. (Números 11, 2)

  • Aquel lugar fue llamado Taberá -que significa Incendio- porque allí se había encendido el fuego del Señor contra los israelitas. (Números 11, 3)

  • se la pasarán a los habitantes de esa tierra. Ellos han oído que tú, Señor, estás en medio de este pueblo; que te dejas ver claramente cuando tu nube se detiene sobre ellos; y que avanzas delante de ellos, de día en la columna de nube, y de noche en la columna de fuego. (Números 14, 14)

  • pongan fuego en ellos, y mañana échenles incienso en la presencia del Señor. Aquel a quien el Señor elija será el consagrado. ¡Ustedes, hijos de Leví, se han excedido en sus atribuciones!". (Números 16, 7)

  • Cada uno tomó su incensario, le puso fuego y le echó incienso. Luego ocuparon sus puestos a la entrada de la Carpa del Encuentro, junto con Moisés y Aarón. (Números 16, 18)

  • Luego bajó fuego del Señor y consumió a los doscientos cincuenta hombres que habían ofrecido incienso. (Números 16, 35)

  • "Man-da a Eleazar, hijo del sacerdote Aarón, que retire los incensarios de en medio de las brasas y que desparrame el fuego en otra parte, porque esos incensarios han sido santificados. (Números 17, 2)

  • "Toma el incensario, coloca en él fuego del altar y échale incienso. En seguida ve adonde está la comunidad y practica el rito de expiación en favor de ellos. Porque la ira del Señor se ha desatado y ha comenzado la plaga". (Números 17, 11)

  • Entonces el sacerdote tomará un trozo de madera de cedro, un ramillete de hisopo y una cinta de púrpura roja y los arrojará en el fuego donde se queme la vaca. (Números 19, 6)


“Se precisamos ter paciência para suportar os defeitos dos outros, quanto mais ainda precisamos para tolerar nossos próprios defeitos!” São Padre Pio de Pietrelcina