Encontrados 2344 resultados para: todo es vanidad

  • no es parcial ni hipócrita. Los que trabajan por la paz siembran en la paz y cosechan frutos en todo lo bueno. (Carta de Santiago 3, 18)

  • Estaban preparando lo que mantiene a los ángeles en suspenso, y que ahora les ha sido anunciado por los evangelizadores de ustedes, al mismo tiempo que el Espíritu Santo les era enviado desde el cielo. Y les fue revelado que todo esto sería, no para ellos, sino para ustedes. (1º Carta de Pedro 1, 12)

  • Al aceptar la verdad, han logrado la purificación interior, de la que procede el amor sincero a los hermanos; ámense pues unos a otros de todo corazón, (1º Carta de Pedro 1, 22)

  • Que los sirvientes obedezcan a sus patrones con todo respeto, no sólo a los que son buenos y comprensivos, sino también a los que son duros. (1º Carta de Pedro 2, 18)

  • Ya es bastante el tiempo que dimos a todo lo que buscan los paganos: excesos, pasiones, borracheras, orgías y culto de los ídolos. (1º Carta de Pedro 4, 3)

  • Sobre todo ámense de verdad unos a otros, pues el amor hace perdonar una multitud de pecados. (1º Carta de Pedro 4, 8)

  • Si alguno habla, que sean palabras de Dios; si cumple algún ministerio, hágalo con el poder de Dios, para que Dios sea glorificado en todo por Cristo Jesús. A él sea la gloria y el poder por los siglos de los siglos. Amén. (1º Carta de Pedro 4, 11)

  • Su poder divino nos ha dado todo lo que necesitamos para la vida y la piedad, en primer lugar el conocimiento de Aquel que nos ha llamado por su propia gloria y fuerza. (2º Carta de Pedro 1, 3)

  • En cambio, quien no tiene todo esto es ciego y corto de vista, y se ha olvidado de que fue purificado de sus pecados pasados. (2º Carta de Pedro 1, 9)

  • Por eso procuro hacer todo lo necesario para que, después de mi partida, recuerden constantemente estas cosas. (2º Carta de Pedro 1, 15)

  • «¿En qué quedó la promesa de su venida? Desde que murieron nuestros padres en la fe todo sigue igual que al comienzo del mundo.» (2º Carta de Pedro 3, 4)

  • Llegará el día del Señor como hace un ladrón, y entonces los cielos se desarmarán entre un ruido ensordecedor, los elementos se derretirán por el calor y la tierra con todo lo que hay en ella se consumirá. (2º Carta de Pedro 3, 10)


“De todos os que vierem pedir meu auxílio, nunca perderei nenhum!” São Padre Pio de Pietrelcina