Encontrados 200 resultados para: Jonatán
Y empezó el combate. Jonatán levantó su brazo para herir a Báquides, pero éste lo esquivó, echándose hacia atrás. (1 Macabeos 9, 47)
Entonces Jonatán y los suyos saltaron al Jordán, atravesándolo a nado; sus enemigos no los siguieron. (1 Macabeos 9, 48)
Entonces todos los renegados se reunieron. Dijeron: «Jonatán y los suyos viven en paz sin temor alguno. Mandemos, pues, a buscar a Báquides para que se apodere de todos en una sola noche.» (1 Macabeos 9, 58)
Báquides se puso en camino con numerosas tropas. Mandó clandestinamente cartas a sus partidarios de Judea para que tomaran preso a Jonatán y a los suyos, pero no tuvieron éxito, porque fueron descubiertos sus planes. (1 Macabeos 9, 60)
Incluso los partidarios de Jonatán apresaron a cincuenta hombres del país, que eran los jefes de esta conspiración, y los ejecutaron. (1 Macabeos 9, 61)
Jonatán y Simón se retiraron con los suyos a Betbasí, en el desierto, repararon las ruinas y las fortificaron. (1 Macabeos 9, 62)
Jonatán , entonces, dejando en la ciudad a su hermano Simón, hizo una salida por la región con un puñado de hombres. (1 Macabeos 9, 65)
Cuando Jonatán lo supo, le envió mensajeros para firmar con él un tratado de paz y cambiar prisioneros. (1 Macabeos 9, 70)
Así hubo paz en Israel, y Jonatán fijó su residencia en Micmás, donde comenzó a gobernar el país, e hizo desaparecer de Israel a los renegados. (1 Macabeos 9, 73)
Al mismo tiempo, mandó a Jonatán una carta amistosa en que le ofrecía amplios poderes. (1 Macabeos 10, 3)
Demetrio, pues, autorizó a Jonatán para formar un ejército y para fabricar armas; lo llamó su aliado y ordenó que le entregaran los rehenes que estaban en la fortaleza de Jerusalén. (1 Macabeos 10, 6)
Jonatán fue a Jerusalén y leyó la carta delante de todo el pueblo y de los de la fortaleza. (1 Macabeos 10, 7)