Znaleziono 103 Wyniki dla: ministerio de alabanza
El temor del Señor es el comienzo de la sabiduría: son prudentes los que lo practican. ¡El Señor es digno de alabanza eternamente! (Salmos 111, 10)
Te ofreceré un sacrificio de alabanza, e invocaré el nombre del Señor. (Salmos 116, 17)
Que mis labios expresen tu alabanza, porque me has enseñado tus preceptos. (Salmos 119, 171)
¡Grande es el Señor y muy digno de alabanza: su grandeza es insondable! (Salmos 145, 3)
Mi boca proclamará la alabanza del Señor: que todos los vivientes bendigan su santo Nombre, desde ahora y para siempre. (Salmos 145, 21)
¡Qué bueno es cantar a nuestro Dios, qué agradable y merecida es su alabanza! (Salmos 147, 1)
y él exalta la fuerza de su pueblo. ¡A él, la alabanza de todos sus fieles, y de Israel, el pueblo de sus amigos! ¡Aleluya! (Salmos 148, 14)
¡Aleluya! Canten al Señor un canto nuevo, resuene su alabanza en la asamblea de los fieles; (Salmos 149, 1)
Derríbalos con la espada de los que te aman, para que te canten himnos de alabanza todos los que conocen tu Nombre". (I Macabeos 4, 33)
porque muy pronto un hombre irreprochable salió en su defensa, con las armas de su propio ministerio: la oración y el incienso expiatorio. Él afrontó la cólera divina y puso fin a la calamidad, demostrando así que era tu servidor. (Sabiduría 18, 21)
No cabe la alabanza en labios del pecador, porque el Señor no se la envía: (Eclesiástico 15, 9)
sin sabiduría no hay alabanza, y es el Señor el que la inspira. (Eclesiástico 15, 10)