Fondare 143 Risultati per: recuperación de bienes
Cuando estaban en su reino, en medio de los abundantes bienes que tú les concedías en esta tierra ancha y feraz que tú habías puesto a su disposición, no te sirvieron ni se arrepintieron de su perversa conducta. (Nehemías 9, 35)
Y ahora nosotros mismos somos esclavos; y en la tierra que tú diste a nuestros padres para que gozaran de sus frutos y sus bienes, en ella misma estamos sometidos a esclavitud. (Nehemías 9, 36)
Todos mis bienes fueron confiscados, pasando al tesoro real. No me quedó nada más que Ana, mi mujer, y Tobías. (Tobías 1, 20)
Practica con tus bienes la limosna y no apartes tu rostro de ningún pobre, porque así no apartará de ti su rostro el Señor. (Tobías 4, 7)
Bendice al Señor Dios en todo tiempo; pídele que tus caminos sean rectos y prósperos tus planes; porque no es del hombre el consejo, sino el Señor es quien da todos los bienes y humilla, según quiere, hasta lo más profundo. Recuerda, hijo mío, todos mis mandatos, y que jamás se borren de tu corazón. (Tobías 4, 19)
Es hija única. El pariente más próximo eres tú y el que tiene más derecho que nadie a casarse con ella y heredar los bienes de su padre. Es una joven sensata, valiente, muy hermosa, y su padre es muy bueno. (Tobías 6, 12)
Luego tomarás la mitad de mis bienes y te irás feliz a casa de tus padres; heredarás la otra mitad cuando hayamos muerto mi mujer y yo. Ánimo, hijo, que soy ya para siempre tu padre y Edna tu madre, como lo somos de tu mujer Sara. Ánimo, hijo". (Tobías 8, 21)
Ragüel le entregó a Sara, su mujer, y la mitad de sus bienes: criados y criadas, vacas y ovejas, asnos y camellos, vestidos, dinero y utensilios; (Tobías 10, 10)
Entonces el ángel llamó a los dos aparte y les dijo: "Bendecid a Dios y dadle gracias, honradle y alabadle ante todo el mundo porque os ha colmado de bienes. Bendecidle y cantad himnos a su nombre. Dad a conocer a todos los hombres las obras de Dios, como es justo, y no os canséis de darle gracias. (Tobías 12, 6)
Tobit murió en paz a la edad de ciento doce años y fue dignamente sepultado en Nínive. Tenía sesenta y dos años cuando se quedó ciego. Después de recuperar la vista abundó en bienes e hizo limosnas; continuó alabando a Dios y celebrando su grandeza. (Tobías 14, 2)
Entonces mandó a la administradora de todos sus bienes que llamara a Cabris y a Carmis, los ancianos de la ciudad. (Judit 8, 10)
de la matanza de nuestros hermanos, de la esclavitud de nuestra tierra, de la destrucción de nuestros bienes en medio de los pueblos donde estemos desterrados. Nuestros conquistadores nos humillarán y nos despreciarán, (Judit 8, 22)