Fondare 60 Risultati per: reinado

  • El año dieciocho de su reinado, mandó a Safán, hijo de Asalías, a Maasías, comandante de la ciudad, y a Yoaj, hijo de Yoajaz, heraldo, que reparasen la Casa de Yahveh su Dios para purificar la tierra y la Casa. (II Crónicas 34, 8)

  • Esta Pascua se celebró el año dieciocho del reinado de Josías. (II Crónicas 35, 19)

  • y sobornaron contra ellos a algunos consejeros para hacer fracasar su proyecto; así durante todo el tiempo de Ciro, rey de Persia, hasta el reinado de Darío, rey de Persia. (Esdras 4, 5)

  • Bajo el reinado de Jerjes, al comienzo de su reinado, presentaron ellos por escrito una denuncia contra los habitantes de Judá y Jerusalén. (Esdras 4, 6)

  • Así se suspendieron las obras de la Casa de Dios en Jerusalén: quedaron interrumpidas hasta el año segundo del reinado de Darío, rey de Persia. (Esdras 4, 24)

  • Esta Casa fue terminada el día veintitrés del mes de Adar, el año sexto del reinado del rey Darío. (Esdras 6, 15)

  • Después de estos acontecimientos, bajo el reinado de Artajerjes, rey de Persia, Esdras, hijo de Seraías, hijo de Azarías, hijo de Jilquías, (Esdras 7, 1)

  • Estos son, con su genealogía, los cabezas de familia que subieron conmigo de Babilonia en el reinado del rey Artajerjes: (Esdras 8, 1)

  • En tiempo de Elyasib, Yoyadá, Yojanán y Yaddúa, los cabezas de familias sacerdotales fueron registrados en el libro de las Crónicas, hasta el reinado de Darío el persa. (Nehemías 12, 22)

  • Muerto Salmanasar, le sucedió en el trono su hijo Senaquerib; en su reinado, los caminos de Media se hicieron inseguros y no pude volver allí. (Tobías 1, 15)

  • En el reinado de Asarjaddón pude regresar a mi casa y me fue devuelta mi mujer Ana y mi hijo Tobías. En nuestra solemnidad de Pentecostés, que es la santa solemnidad de las Semanas, me habían preparado una excelente comida y me dispuse a comer. (Tobías 2, 1)

  • Y dijo: ¡Bendito sea Dios, que vive eternamente, y bendito sea su reinado! (Tobías 13, 1)


“Quanto maiores forem os dons, maior deve ser sua humildade, lembrando de que tudo lhe foi dado como empréstimo.”(Pe Pio) São Padre Pio de Pietrelcina