Fondare 474 Risultati per: sumo sacerdote

  • Ahora bien, Zorobabel, hijo de Sealtiel, Josué, hijo de Josadac, sumo sacerdote, y todo el pueblo, escucharon estas palabras de Yavé su Dios que les hablaba por medio del profeta Ageo, pues hablaba por encargo de Yavé, su Dios. Y el pueblo se llenó de respeto a Dios. (Ageo 1, 12)

  • que transmitiera el siguiente recado a Zorobabel, gobernador de Judá, y a Josué, sumo sacerdote, y a todo el pueblo en general: LA GLORIA DEL TEMPLO NUEVO (Ageo 2, 2)

  • Yavé presentó ante mis ojos a Josué, el gran sacerdote. Estaba éste frente al ángel de Yavé, y tenía a su derecha a Satán, que lo estaba acusando. (Zacarías 3, 1)

  • Escucha, pues, Josué, sumo sacerdote, tú y tus compañeros que se sientan en tu presencia, pues todos ustedes son personas importantes. (9b) Voy a traer acá a mi servidor, el Brote, (Zacarías 3, 8)

  • Con el oro y plata recolectados harás una corona que pondrás en la cabeza de Josué, hijo de Josadac, sumo sacerdote. (Zacarías 6, 11)

  • El construirá el Templo de Yavé y recibirá el poder. Se sentará en un trono para gobernar, y también un sacerdote se sentará en un trono, con armonía perfecta entre ambos. (Zacarías 6, 13)

  • Porque los labios del sacerdote guardan el conocimiento y en su boca se debe encontrar la ley, pues es el mensajero de Yavé de los ejércitos. (Malaquías 2, 7)

  • Jesús le dijo: «Mira, no se lo digas a nadie; pero ve a mostrarte al sacerdote y ofrece la ofrenda ordenada por la Ley de Moisés, pues tú tienes que hacerles una declaración.» (Evangelio según San Mateo 8, 4)

  • Por entonces, los jefes de los sacerdotes y las autoridades judías se reunieron en el palacio del sumo sacerdote, que se llamaba Caifás, (Evangelio según San Mateo 26, 3)

  • Uno de los que estaban con Jesús sacó la espada e hirió al sirviente del sumo sacerdote, cortándole una oreja. (Evangelio según San Mateo 26, 51)

  • Los que tomaron preso a Jesús lo llevaron a casa del sumo sacerdote Caifás, donde se habían reunido los maestros de la Ley y las autoridades judías. (Evangelio según San Mateo 26, 57)

  • Pedro lo iba siguiendo de lejos, hasta llegar al palacio del sumo sacerdote. Entró en el patio y se sentó con los policías del Templo, para ver en qué terminaba todo. (Evangelio según San Mateo 26, 58)


“O Anjo de Deus não nos abandona jamais.” São Padre Pio de Pietrelcina