Talált 52 Eredmények: pastores
Por tanto, esto dice el Señor, Dios de Israel, sobre los pastores que guían a mi pueblo: Vosotros habéis dispersado mi rebaño, lo habéis descarriado sin preocuparos de él. Pero yo me voy a ocupar ahora de vosotros -dice el Señor-, castigando vuestras perversas acciones. (Jeremías 23, 2)
Suscitaré para ellos pastores que los apacentarán; no sufrirán más temor y angustia, ni se volverá a perder ninguno -dice el Señor-. (Jeremías 23, 4)
¡Gritad, pastores; gritad, revolcaos en la tierra, mayorales del rebaño, porque ha llegado el día de vuestra matanza; caeréis como carneros escogidos! (Jeremías 25, 34)
No hay ya evasión para los pastores, ni salvación para los mayorales del rebaño. (Jeremías 25, 35)
Escuchad el clamor de los pastores, el griterío de los mayorales del rebaño, porque el Señor devasta sus pastos. (Jeremías 25, 36)
En esta tierra habitarán Judá y todas sus ciudades, los labradores y los pastores. (Jeremías 31, 24)
Esto dice el Señor: Volverá a haber en este lugar, ahora desierto, sin hombres ni animales, así como en todas las ciudades, pastos donde los pastores apacentarán el rebaño. (Jeremías 33, 12)
Rebaño perdido era mi pueblo; sus pastores lo extraviaban, le hacían vagar por las montañas; de monte en colina caminaba, olvidando su aprisco. (Jeremías 50, 6)
"Hijo de hombre, profetiza contra los pastores de Israel y diles: Pastores, esto dice el Señor Dios: ¡Ay de los pastores de Israel que se apacientan a sí mismos! ¿No es el rebaño al que deben apacentar los pastores? (Ezequiel 34, 2)
Escuchad, pues, pastores, la palabra del Señor: (Ezequiel 34, 7)
Por mi vida, dice el Señor Dios, que por haber sido mi rebaño expuesto al pillaje y mis ovejas pasto de todas las fieras del campo por falta de pastor, por no haber cuidado mis pastores mi ganado y haberse en cambio apacentado a sí mismos en lugar de mi rebaño, (Ezequiel 34, 8)
por eso, escuchad, pastores, la palabra del Señor. (Ezequiel 34, 9)