Talált 1464 Eredmények: mal
Desterrad la amargura, la ira, los gritos, los insultos y toda clase de maldad. (Efesios 4, 31)
aprovechando el tiempo, porque los días son malos. (Efesios 5, 16)
Porque nuestra lucha no es contra gente de carne y hueso, sino contra los principados y potestades, contra los dominadores de este mundo tenebroso, contra los espíritus del mal, que moran en los espacios celestes. (Efesios 6, 12)
Por esto, recibid la armadura de Dios, para que podáis resistir en el día malo y ser perfectos en todo. (Efesios 6, 13)
Empuñad en todas las ocasiones el escudo de la fe, con el cual podáis inutilizar los dardos encendidos del Maligno. (Efesios 6, 16)
a fin de que seáis irreprochables y sin malicia, hijos de Dios irreprensibles en medio de esta generación perversa y descarriada, en medio de la cual brilláis como astros en el universo, (Filipenses 2, 15)
¡Cuidado con los perros, cuidado con los malos obreros, cuidado con los de la circuncisión! (Filipenses 3, 2)
Pero ahora dejad todo eso: la ira, el rencor, la malicia, los insultos y las groserías. (Colosenses 3, 8)
Como sabéis, después de haber sido maltratados y ultrajados en Filipos, llenos de confianza en el Señor, nos atrevimos a anunciaros su evangelio en medio también de grandes luchas. (I Tesalonicenses 2, 2)
En efecto, nuestra predicación no se basa en el error, en malas intenciones o en ánimo de engañar. (I Tesalonicenses 2, 3)
Procurad que nadie vuelva a otro mal por mal; tened siempre por meta el bien, tanto entre vosotros como para los demás. (I Tesalonicenses 5, 15)
Evitad toda clase de mal. (I Tesalonicenses 5, 22)