Talált 50 Eredmények: Adán y Eva en el paraíso

  • Esté tu mano sobre el hombre de tu diestra, sobre el hijo de Adán que para ti fortaleciste. (Salmos 80, 18)

  • Recuerda, Señor, qué es la existencia, para qué poco creaste a los hijos de Adán. (Salmos 89, 48)

  • Tú al polvo reduces a los hombres, diciendo: «¡Tornad, hijos de Adán!» (Salmos 90, 3)

  • ¡Den gracias a Yahveh por su amor, por sus prodigios con los hijos de Adán! (Salmos 107, 8)

  • ¡Den gracias a Yahveh por su amor, por sus prodigios con los hijos de Adán! (Salmos 107, 15)

  • ¡Den gracias a Yahveh por su amor, por sus prodigios con los hijos de Adán! (Salmos 107, 21)

  • ¡Den gracias a Yahveh por su amor, por sus prodigios con los hijos de Adán! (Salmos 107, 31)

  • Los cielos, son los cielos de Yahveh, la tierra, se la ha dado a los hijos de Adán. (Salmos 115, 16)

  • Lámed. para mostrar a los hijos de Adán tus proezas, el esplendor y la gloria de tu reino. (Salmos 145, 12)

  • Tus brotes, un paraíso de granados, con frutos exquisitos: (Cantar 4, 13)

  • Y yo, como canal derivado de un río, como caz que al paraíso sale, (Eclesiástico 24, 30)

  • Así todos los hombres vienen del suelo, de la tierra fue creado Adán. (Eclesiástico 33, 10)


“Quanto maiores forem os dons, maior deve ser sua humildade, lembrando de que tudo lhe foi dado como empréstimo.” São Padre Pio de Pietrelcina