Talált 268 Eredmények: lluvia de piedras
Finalmente colocaron las piedras en las hombreras del efod, para que fueran un memorial en favor de los israelitas, delante del Señor, como él se lo había ordenado a Moisés. (Exodo 39, 7)
Lo guarnecieron de piedras preciosas dispuestas en cuatro hileras: en la primera había un jaspe rojo, un topacio y una esmeralda; (Exodo 39, 10)
Las piedras eran doce en total, como los nombres de los hijos de Israel, y cada una llevaba grabado el nombre de una de las doce tribus, como se graban los sellos. (Exodo 39, 14)
mandará quitar las piedras manchadas y las hará arrojar fuera de la ciudad, a un lugar impuro. (Levítico 14, 40)
Luego tomarán otras piedras para reemplazar a las primeras y se preparará otra mezcla para revocar la casa. (Levítico 14, 42)
Pero si después de haber quitado las piedras, y de haber rasqueteado y revocado la casa, la mancha vuelve a aparecer, (Levítico 14, 43)
Esta será derribada, y sus piedras, su madera y todo el material serán llevados fuera de la ciudad, a un lugar impuro. (Levítico 14, 45)
No se fabriquen ídolos ni se erijan imágenes o piedras conmemorativas; no pongan en su tierra piedras grabadas para postrarse delante de ellas, porque yo soy el Señor, su Dios. (Levítico 26, 1)
El pueblo tenía que ir a buscarlo; una vez recogido, lo trituraban con piedras de moler o lo machacaban en un mortero, lo cocían en una olla, y lo preparaban en forma de galletas. Su sabor era como el de un pastel apetitoso. (Números 11, 8)
Por eso, trátenlos de este modo: derriben sus altares, destruyan sus piedras conmemorativas, talen sus postes sagrados y prendan fuego a sus ídolos. (Deuteronomio 7, 5)
un país donde comerás pan en abundancia y donde nada te faltará, donde las piedras son de hierro y de cuyas montañas extraerás cobre. (Deuteronomio 8, 9)
En cambio, la tierra que vas a tomar en posesión es una región de montañas y valles regados por la lluvia del cielo, (Deuteronomio 11, 11)