Talált 38 Eredmények: Santidad
Así manifestaré mi grandeza y mi santidad y me daré a conocer a la vista de numerosas naciones, y ellas sabrán que yo soy el Señor. (Ezequiel 38, 23)
Cuando yo los haga volver de entre los pueblos y los congregue lejos de los países de sus enemigos, manifestaré mi santidad por medio de ellos a la vista de naciones numerosas. (Ezequiel 39, 27)
El Señor ha jurado por su santidad: Sí, llegarán días sobre ustedes en que las levantarán con garfios, y hasta a la última de ustedes, con arpones. (Amós 4, 2)
lo sirvamos en santidad y justicia bajo su mirada, durante toda nuestra vida. (Lucas 1, 75)
Al ver esto, Pedro dijo al pueblo: «Israelitas, ¿de qué se asombran? ¿Por qué nos miran así, como si fuera por nuestro poder o por nuestra santidad, que hemos hecho caminar a este hombre? (Hechos 3, 12)
Voy a hablarles de una manera humana, teniendo en cuenta la debilidad natural de ustedes. Si antes entregaron sus miembros, haciéndolos esclavos de la impureza y del desorden hasta llegar a sus excesos, pónganlos ahora al servicio de la justicia para alcanzar la santidad. (Romanos 6, 19)
Ahora, en cambio, ustedes están libres del pecado y sometidos a Dios: el fruto de esto es la santidad y su resultado, la Vida eterna. (Romanos 6, 22)
Este es para nosotros un motivo de orgullo: el testimonio que nos da nuestra conciencia de que siempre, y particularmente en relación con ustedes, nos hemos comportado con la santidad y la sinceridad que proceden de Dios, movidos, no por una sabiduría puramente humana, sino por la gracia de Dios. (II Corintios 1, 12)
y revestirse del hombre nuevo, creado a imagen de Dios en la justicia y en la verdadera santidad. (Efesios 4, 24)
Que él fortalezca sus corazones en la santidad y los haga irreprochables delante de Dios, nuestro Padre, el Día de la Venida del Señor Jesús con todos sus santos. Amén. (I Tesalonicenses 3, 13)
que cada uno sepa usar de su cuerpo con santidad y respeto, (I Tesalonicenses 4, 4)
Dios, en efecto, no nos llamó a la impureza, sino a la santidad. (I Tesalonicenses 4, 7)