Talált 90 Eredmények: Angustia
Si me asaltan la angustia y la ansiedad, tus mandamientos aún son mis delicias. (Salmos 119, 143)
Al Señor, en medio de mi angustia, yo clamé y él me respondió. (Salmos 120, 1)
Así estuvo muchos días sin que pudiera superar esta profunda angustia. Creyendo que iba a morir, (1 Macabeos 6, 9)
No se podía mirar el rostro del Sumo Sacerdote sin quedar impresionado, pues su aspecto y su palidez demostraban la angustia de su alma. (2 Macabeos 3, 16)
cuando les llegue el hurracán del terror y se los lleve el torbellino de las desdichas, cuando queden bajo el peso de la miseria y de la angustia. (Proverbios 1, 27)
Pues el Señor es ternura y misericordia; perdona nuestros pecados y nos salva en los momentos de angustia. (Sirácides (Eclesiástico) 2, 11)
Pero la mujer que tiene celos de otra es una angustia, un dolor íntimo, su lengua es un azote que no perdona a nadie. (Sirácides (Eclesiástico) 26, 6)
¡Su misericordia será tan bienvenida en momentos de angustia como lo son las nubes después de una sequía! (Sirácides (Eclesiástico) 35, 24)
Rugirá contra él, en ese día, como el bramido del mar. Al mirar el país sólo se verán tinieblas, angustia, y luz que desaparece entre las sombras. (Isaías 5, 30)
Pero allí donde se encontraba la angustia, desaparecerá la noche. En el pasado casi aniquiló al país de Zabulón y al país de Neftalí, pero en el futuro se llenará de gloria la carretera del mar, más allá del Jordán, en la región de los paganos. (Isaías 8, 23)
Yavé, en la angustia te buscábamos; vivíamos bajo la opresión y tu castigo nos apretaba. (Isaías 26, 16)
¡Yavé, ten compasión, pues en ti esperamos! Sé tú nuestro apoyo, por la mañana, y nuestra salvación en el tiempo de la angustia. (Isaías 33, 2)