1. Canción de las subidas A ti levanto mis ojos, a ti que habitas en el cielo.

2. Como están los ojos del esclavo fijos en su señor, como están los ojos de la esclava fijos en su señora, así están nuestros ojos fijos en el Señor, nuestro Dios, hasta que se compadezca de nosotros.

3. Ten piedad de nosotros, Señor, ten piedad de nosotros, que estamos hartos de tanto desprecio;

4. estamos hartos de las burlas de los ricos y del desprecio de los orgullosos.





“Quando te encontrares diante de Deus, na oração considera-te banhado na luz da verdade, fala-lhe se puderes, deixa simplesmente que te veja e não tenhas preocupação alguma”. São Padre Pio de Pietrelcina