pronađen 38 Rezultati za: torres

  • Sin embargo, cada cual tomó su equipo guerrero e hicieron hogueras sobre las torres, permaneciendo en alarma toda la noche. (Judit 7, 5)

  • Hizo volver al pueblo a sus puestos, a las murallas y a las torres de la ciudad. A las mujeres y a los niños los mandó a sus casas. Pero en la ciudad había una gran consternación. (Judit 7, 32)

  • Dad vueltas a Sión, enumerad sus torres; (Salmos 48, 13)

  • Fortificaron la ciudad de David con un muro grande y sólido, defendido con torres fuertes, y la convirtieron en ciudadela. (I Macabeos 1, 33)

  • Por entonces fortificaron también el monte Sión con murallas y fuertes torres, para que, si volvían los gentiles, no las pudieran destruir, como había sucedido. (I Macabeos 4, 60)

  • Les obligó a encerrarse en sus torres, los bloqueó y condenó a muerte, incendiando las torres con todo lo que había dentro. (I Macabeos 5, 5)

  • Judas, con sus hermanos, se puso en marcha para luchar contra los descendientes de Esaú en la región meridional. Tomó Hebrón y sus aldeas, derribó sus fortificaciones e incendió las torres de sus murallas. (I Macabeos 5, 65)

  • Simón reconstruyó la fortaleza de Judea, la rodeó de altas torres, de murallas sólidas, de puertas con cerrojos y depositó víveres en ellas. (I Macabeos 13, 33)

  • Por entonces Simón acampó frente a Guézer con su ejército. Construyó una torre móvil y la acercó a la ciudad; atacó una de las torres, y se apoderó de ella. (I Macabeos 13, 43)

  • y muchos se refugiaron en las torres de la campiña de Asdod. Juan incendió la ciudad y murieron unos dos mil enemigos. Juan regresó a Judea sano y salvo. (I Macabeos 16, 10)

  • No menos de nueve mil hombres se refugiaron en dos torres fortísimas, con todo lo necesario para resistir un asedio prolongado. (II Macabeos 10, 18)

  • Los soldados de Simón, seducidos por la avaricia, se dejaron comprar a precio de plata por los de las torres y, por setenta mil dracmas, dejaron escapar cierto número de ellos. (II Macabeos 10, 20)


“Deus nunca me recusou um pedido”. São Padre Pio de Pietrelcina