pronađen 168 Rezultati za: ofrendas diarias

  • y un macho cabrío para el sacrificio por el pecado, además del holocausto diario, con sus correspondientes ofrendas de pan y de vino. (Números 29, 22)

  • con las correspondientes ofrendas de pan y vino, según el número de novillos, carneros y corderos; (Números 29, 24)

  • y un macho cabrío para el sacrificio por el pecado, además del holocausto diario, con sus correspondientes ofrendas de pan y de vino. (Números 29, 25)

  • con las correspondientes ofrendas de pan y de vino, según el número de novillos, carneros y corderos; (Números 29, 27)

  • y un macho cabrío para el sacrificio por el pecado, además del holocausto diario, con sus correspondientes ofrendas de pan y de vino. (Números 29, 28)

  • con las correspondientes ofrendas de pan y de vino, según el número de novillos, carneros y corderos; (Números 29, 30)

  • y un macho cabrío para el sacrificio por el pecado, además del holocausto diario, con sus correspondientes ofrendas de pan y de vino. (Números 29, 31)

  • con las correspondientes ofrendas de pan y de vino, según el número de novillos, carneros y corderos; (Números 29, 33)

  • y un macho cabrío para el sacrificio por el pecado, además del holocausto diario, con sus correspondientes ofrendas de pan y de vino. (Números 29, 34)

  • con las correspondientes ofrendas de pan y de vino, según el número de novillos, carneros y corderos; (Números 29, 37)

  • y un macho cabrío en sacrificio por el pecado, además del holocausto diario, con sus correspondientes ofrendas de pan y de vino. (Números 29, 38)

  • Esto es lo que ofreceréis al Señor en vuestras fiestas, además de vuestras ofrendas votivas o espontáneas, de vuestros holocaustos, ofrendas de pan y de vino y sacrificios de reconciliación". (Números 29, 39)


“Que Maria sempre enfeite sua alma com as flores e o perfume de novas virtudes e coloque a mão materna sobre sua cabeça. Fique sempre e cada vez mais perto de nossa Mãe celeste, pois ela é o mar que deve ser atravessado para se atingir as praias do esplendor eterno no reino do amanhecer.” São Padre Pio de Pietrelcina