Trouvé 265 Résultats pour: genealogía de Salomón

  • que, conforme te tengo jurado por el Señor, Dios de Israel: Salomón, tu hijo, me sucederá en el reino y él se sentará sobre mi trono en lugar mío; así lo haré hoy mismo". (I Reyes 1, 30)

  • y él les ordenó: "Tomad con vosotros a los servidores de vuestro señor, montad a mi hijo Salomón sobre mi propia mula y llevadlo a Guijón. (I Reyes 1, 33)

  • Allí Sadoc, el sacerdote, y Natán, el profeta, lo ungirán por rey de Israel. Y vosotros tocaréis la trompeta y gritaréis: ¡Viva el rey Salomón! (I Reyes 1, 34)

  • Que el Señor esté con Salomón como lo estuvo con el rey, mi señor, y que engrandezca su trono más que el trono de mi señor, el rey David". (I Reyes 1, 37)

  • Sadoc, el sacerdote; Natán, el profeta; Benayas, el hijo de Yehoyadá; los quereteos y los peleteos montaron a Salomón sobre la mula del rey David y lo llevaron a Guijón. (I Reyes 1, 38)

  • Sadoc, el sacerdote, tomó del tabernáculo el cuerno del óleo y ungió a Salomón. Entonces se tocaron las trompetas y todo el pueblo gritó: "¡Viva el rey Salomón!". (I Reyes 1, 39)

  • Jonatán dijo a Adonías: "¡Sí, por cierto! Nuestro señor, el rey David, ha hecho proclamar rey a Salomón. (I Reyes 1, 43)

  • Además, se ha sentado Salomón sobre el trono del reino. (I Reyes 1, 46)

  • Asimismo los servidores del rey han ido a felicitar a nuestro señor, el rey David, diciendo: Ensalce tu Dios el nombre de Salomón más que tu nombre y engrandezca su trono más que tu trono. Y el rey ha hecho una inclinación reverente desde su lecho. (I Reyes 1, 47)

  • Y Adonías, por miedo a Salomón, se levantó y fue a agarrarse a los cuernos del altar. (I Reyes 1, 50)

  • Informaron de ello a Salomón: "Adonías tiene miedo del rey Salomón y se ha agarrado a los cuernos del altar diciendo: Júreme hoy el rey Salomón que no ha de matar a espada a su siervo". (I Reyes 1, 51)

  • Salomón dijo: "Si se porta bien, no caerá en tierra uno solo de sus cabellos; pero si es sorprendido en delito, morirá". (I Reyes 1, 52)


“Não se desencoraje se você precisa trabalhar muito para colher pouco. Se você pensasse em quanto uma só alma custou a Jesus, você nunca reclamaria!” São Padre Pio de Pietrelcina