Trouvé 47 Résultats pour: oveja perdida

  • Si uno roba un buey o una oveja y los mata o vende, pagará cinco bueyes por un buey y cuatro ovejas por una. (Exodo 21, 37)

  • Si alguien no tiene para devolver lo que robó será vendido él mismo para pagar. Si lo robado se encuentra vivo en su poder, sea buey, burro u oveja, debe restituir el doble. (Exodo 22, 3)

  • Si alguien pasa a su prójimo, para que se lo guarde, un burro, buey u oveja, o cualquier otro animal, y éste muere, sufre algún daño o es robado sin que nadie lo vea, (Exodo 22, 9)

  • Pero que ninguno suba contigo, ni aparezca nadie en todo el monte: ni siquiera oveja ni buey paste en los alrededores.» (Exodo 34, 3)

  • Si ofrece por el pecado una ovejita, tomará una oveja sin defecto, (Levítico 4, 32)

  • Luego, como sacrificio de reparación por el pecado cometido, llevará a Yavé una hembra, oveja o cabra, y el sacerdote hará la expiación por dicho pecado y persona. (Levítico 5, 6)

  • o mintió respecto de una cosa perdida que encontró, o hizo falso juramento en cualquier asunto en que los hombres suelen pecar. (Levítico 5, 22)

  • El que pecó y que cometió un delito, tendrá que devolver lo que robó o quitó a la fuerza o lo que guardó del depósito o de la cosa perdida que encontró (Levítico 5, 23)

  • El día octavo tomará dos corderos sin defecto y una oveja de un año sin defecto; y como oblación tres décimas de flor de harina amasada con aceite y un cuartillo de aceite. (Levítico 14, 10)

  • Cualquier hombre del pueblo de Israel que sacrifique un ternero, una oveja o una cabra dentro del campamento o fuera del mismo, (Levítico 17, 3)

  • la víctima sólo será aceptada si es macho, sin defecto, buey, oveja o cabra. (Levítico 22, 19)

  • Si es buey u oveja desproporcionado o enano, podrán presentarlo como ofrenda voluntaria, pero no será aceptado en cumplimiento de voto. (Levítico 22, 23)


“Onde não há obediência, não há virtude. Onde não há virtude, não há bem, não há amor; e onde não há amor, não há Deus; e sem Deus não se chega ao Paraíso. Tudo isso é como uma escada: se faltar um degrau, caímos”. São Padre Pio de Pietrelcina