Löydetty 1227 Tulokset: no recibir en casa

  • Pablo se relacionó con ellos; y como eran del mismo oficio, se quedó trabajando en su casa; se dedicaban a fabricar tiendas de campaña. (Hechos 18, 3)

  • Partió de allí, y fue a casa de un prosélito, que vivía junto a la sinagoga. (Hechos 18, 7)

  • El hombre poseído del espíritu maligno saltó sobre ellos, se apoderó de los dos y los maltrató, de modo que escaparon de aquella casa desnudos y heridos. (Hechos 19, 16)

  • En todo os he mostrado que se debe trabajar así para socorrer a los necesitados, recordando las palabras de Jesús, el Señor: "Hay más felicidad en dar que en recibir". (Hechos 20, 35)

  • Fueron también con nosotros algunos discípulos de Cesarea, y nos llevaron a casa de un tal Nasón, chipriota, antiguo discípulo, donde debíamos hospedarnos. (Hechos 21, 16)

  • Al día siguiente Pablo fue con nosotros a casa de Santiago, donde se reunieron todos los presbíteros. (Hechos 21, 18)

  • Al día siguiente llegamos a Sidón; y Julio, que trataba con benevolencia a Pablo, le permitió ir a casa de sus amigos para que le cuidasen. (Hechos 27, 3)

  • Cuando entramos en Roma, a Pablo le permitieron quedarse en una casa particular con un soldado que lo custodiase. (Hechos 28, 16)

  • Pablo estuvo dos años en una casa alquilada; allí recibía a todos los que iban a verlo, (Hechos 28, 30)

  • Saludad también a la comunidad que se reúne en su casa. Saludad a mi querido Epéneto, que es el primer creyente cristiano de Asia. (Romanos 16, 5)

  • Saludad a Apeles, que ha dado pruebas de su fe en Cristo. Saludad a los de la casa de Aristóbulo. (Romanos 16, 10)

  • Pero si te casas, no pecas. Y si una mujer soltera se casa, tampoco peca. Lo que pasa es que yo quisiera evitaros los problemas que vais a tener en el matrimonio. (I Corintios 7, 28)


“Um dia você verá surgir o infalível triunfo da justiça Divina sobre a injustiça humana”. São Padre Pio de Pietrelcina