Löydetty 363 Tulokset: ejército de madián

  • Gentes de Persia, de Lidia y Libia servían en tu ejército, eran tus guerreros. Colgaban en ti el yelmo y el escudo y te daban esplendor. (Ezequiel 27, 10)

  • "Hijo de hombre, Nabucodonosor, rey de Babilonia, ha emprendido con su ejército grandes movimientos contra Tiro. Toda cabeza ha quedado calva, toda espalda llagada; pero no ha obtenido de Tiro, ni para sí ni para sus tropas, ninguna ventaja del trabajo ejecutado contra ella. (Ezequiel 29, 18)

  • Por tanto, esto dice el Señor Dios: Yo entrego a Nabucodonosor, rey de Babilonia, el país de Egipto; él se apoderará de sus riquezas, lo saqueará, lo entregará al pillaje. Tal será la paga para su ejército. (Ezequiel 29, 19)

  • Allí están Mesec, Tubal y todo su ejército, en torno a su sepulcro; son todos incircuncisos, muertos a espada, por haber sembrado el pánico en la tierra de los vivos. (Ezequiel 32, 26)

  • El Faraón los verá y se consolará de la suerte de su pueblo. Porque el Faraón será muerto a espada con todo su ejército, dice el Señor Dios. (Ezequiel 32, 31)

  • Había sembrado el pánico en la tierra de los vivos y allí está tendido en medio de los incircuncisos, con los muertos a espada: El Faraón y todo su ejército", afirma el Señor Dios. (Ezequiel 32, 32)

  • yo te haré volver, te pondré garfios en las quijadas; te haré salir con todo tu ejército, caballos y caballeros, todos bien equipados; huestes inmensas con adargas y escudos, todos diestros en el manejo de la espada. (Ezequiel 38, 4)

  • y vendrás de tu región de los confines del norte, junto con otros pueblos numerosos, todos montados a caballo, una turba innumerable, un ejército poderoso. (Ezequiel 38, 15)

  • y mandó a los hombres más fuertes de su ejército que ataran a Sidrac, Misac y Abdénago y los arrojaran al ardiente horno de fuego. (Daniel 3, 20)

  • En su lugar surgirá un vástago de sus raíces, que marchará contra el ejército del rey del norte, invadirá su fortaleza y le tratará como vencedor. (Daniel 11, 7)

  • Sus hijos se armarán y reunirán un gran ejército, que, irrumpiendo como un río, inundará, pasará y luego se concentrará de nuevo para asaltar su fortaleza. (Daniel 11, 10)

  • Entonces el rey del sur, irritado, saldrá y combatirá contra él, contra el rey del norte, el cual movilizará un gran ejército, pero este ejército caerá en manos de aquél. (Daniel 11, 11)


“Não se desencoraje se você precisa trabalhar muito para colher pouco. Se você pensasse em quanto uma só alma custou a Jesus, você nunca reclamaria!” São Padre Pio de Pietrelcina