Löydetty 392 Tulokset: agua de la purificación
Estaba próxima la pascua de los judíos, y muchos de la región fueron a Jerusalén antes de la pascua para celebrar los ritos de purificación. (Juan 11, 55)
Luego echó agua en un barreño y comenzó a lavar los pies de sus discípulos y a enjugárselos con la toalla que se había ceñido. (Juan 13, 5)
pero uno de los soldados le traspasó el costado con una lanza, y al punto salió sangre y agua. (Juan 19, 34)
porque Juan bautizó con agua, pero vosotros seréis bautizados en el Espíritu Santo dentro de pocos días. (Hechos 1, 5)
Continuaron su camino y llegaron a un lugar donde había agua; el eunuco dijo: "Mira, aquí hay agua; ¿qué impide que me bautice?". (Hechos 8, 36)
Y mandó detener el carro. Bajaron los dos al agua, Felipe y el eunuco, y lo bautizó. (Hechos 8, 38)
Al salir del agua, el Espíritu del Señor arrebató a Felipe. El eunuco ya no lo vio más, y continuó su camino muy contento. (Hechos 8, 39)
Pedro dijo entonces: "¿Se puede negar el agua del bautismo a éstos, que han recibido el Espíritu Santo como nosotros?". (Hechos 10, 47)
Recordé estas palabras del Señor: Juan bautizó en agua, pero vosotros seréis bautizados en el Espíritu Santo. (Hechos 11, 16)
Al día siguiente Pablo tomó consigo a los hombres, se purificó con ellos y entró en el templo para fijar la fecha en la que terminaban los días de la purificación y en la que sería presentada la ofrenda por cada uno de ellos. (Hechos 21, 26)
Me encontraron en el templo porque participé en el rito de purificación con unos judíos de Asia, pero sin promover motín o desorden alguno. (Hechos 24, 18)
Pero el oficial, queriendo salvar a Pablo, se lo impidió, y ordenó que los que supieran nadar se echasen al agua los primeros y saliesen a tierra, (Hechos 27, 43)