Löydetty 61 Tulokset: Damasco

  • Repartió sus hombres para asaltar de noche a los enemigos; los derrotó y los persiguió hasta Joba, que está al norte de Damasco. (Génesis 14, 15)

  • Abrán respondió: "Señor Dios, ¿qué me vas a dar? Yo estoy ya para morir sin hijos, y el heredero de mi casa será ese Eliezer de Damasco. (Génesis 15, 2)

  • Los sirios de Damasco fueron a socorrer a Hadadézer, rey de Sobá, y David mató a veintidós mil sirios. (II Samuel 8, 5)

  • David puso guarniciones en Siria de Damasco, y los sirios le quedaron sometidos y le pagaron tributo. El Señor daba la victoria a David por dondequiera que iba. (II Samuel 8, 6)

  • Se le juntaron unos desalmados y él se hizo jefe de la banda, mientras David derrotaba a los sirios; se apoderó de Damasco y se estableció allí como rey; (I Reyes 11, 24)

  • Entonces Asá tomó la plata y el oro de los tesoros del templo del Señor y del palacio real, y por medio de sus servidores los envió a Ben Hadad, hijo de Tabrimón y nieto de Jezyón, rey de Siria, que tenía su residencia en Damasco, con este mensaje: (I Reyes 15, 18)

  • Y el Señor le dijo: "Anda, vuelve a emprender tu camino por el desierto hacia Damasco, y, cuando llegues, ungirás a Jazael por rey de Siria; (I Reyes 19, 15)

  • Ben Hadad le dijo: "Las ciudades que mi padre quitó al tuyo te las devolveré, y tú podrás establecer en Damasco plazas comerciales, como hizo mi padre en Samaría". Ajab hizo este pacto con él y le dejó en libertad. (I Reyes 20, 34)

  • ¿No son acaso el Abana y el Farfar, los ríos de Damasco, mejores que todas las aguas de Israel? ¿No me podría bañar en ellos y quedar limpio?". Dio media vuelta y se fue muy indignado. (II Reyes 5, 12)

  • Eliseo fue a Damasco. Ben Hadad, rey de Siria, que estaba enfermo, recibió la noticia de que había llegado el hombre de Dios. (II Reyes 8, 7)

  • Jazael fue a verlo llevando consigo lo mejor de Damasco: una carga de cuarenta camellos. Llegó ante él y dijo: "Tu hijo, Ben Hadad, rey de Siria, me ha enviado a ti para preguntarte si se curará de la enfermedad". (II Reyes 8, 9)

  • El resto de la historia de Jeroboán, todo lo que hizo, el valor con que luchó contra Damasco y restituyó Jamat a Israel, está escrito en el libro de los anales de los reyes de Israel. (II Reyes 14, 28)


“Não sejamos mesquinhos com Deus que tanto nos enriquece.” São Padre Pio de Pietrelcina