Löydetty 2107 Tulokset: Cam
Jacob amaba a Raquel, y dijo: "Te serviré siete años a cambio de Raquel, tu hija menor". (Génesis 29, 18)
Rubén, al tiempo de la siega de los trigos, fue por los campos y encontró mandrágoras, y se las trajo a su madre Lía. Y Raquel dijo a Lía: "Dame, por favor, las mandrágoras de tu hijo". (Génesis 30, 14)
Y ella contestó: "¿Te parece poco haberme quitado a mi marido, que me quieres quitar también las mandrágoras de mi hijo?". Entonces Raquel dijo: "Pues bien, que Jacob duerma contigo esta noche a cambio de las mandrágoras de tu hijo". (Génesis 30, 15)
A la tarde, cuando Jacob volvía del campo, salió Lía a su encuentro y le dijo: "Tienes que dormir conmigo, porque te he alquilado por las mandrágoras de mi hijo". Y él durmió con ella aquella noche. (Génesis 30, 16)
y se separó de Jacob a una distancia de tres días de camino. Jacob siguió apacentando el resto de los rebaños de Labán. (Génesis 30, 36)
De este modo se enriqueció enormemente y tuvo numerosos rebaños, esclavos y esclavas, camellos y asnos. (Génesis 30, 43)
Jacob mandó llamar a Raquel y a Lía al campo donde estaba el rebaño, (Génesis 31, 4)
él, en cambio, me ha engañado y me ha mudado el salario diez veces, aunque Dios no le ha permitido hacerme mal. (Génesis 31, 7)
Jacob se levantó, montó a sus hijos y a sus mujeres en camellos (Génesis 31, 17)
y, con todo su ganado y todo lo que había adquirido en Padán Arán, se puso en camino hacia Isaac, su padre, a la tierra de Canaán. (Génesis 31, 18)
pero ésta había tomado los ídolos y los había escondido debajo de la albarda del camello, sentándose encima de ellos. Labán rebuscó por toda la tienda, pero no los encontró. (Génesis 31, 34)
Cuando Jacob continuaba su camino, le salieron al encuentro unos ángeles de Dios. (Génesis 32, 2)