Löydetty 451 Tulokset: altar de Baal

  • El sacerdote lo quemará en el altar como alimento, manjar abrasado para Yahveh. (Levítico 3, 11)

  • impondrá la mano sobre su cabeza y la inmolará ante la Tienda del Encuentro; los hijos de Aarón derramarán su sangre alrededor del altar. (Levítico 3, 13)

  • El sacerdote lo quemará en el altar como alimento, manjar abrasado de calmante aroma para Yahveh. Toda la grasa perpetua de generación en generación, dondequiera que habitéis: no comeréis nada de grasa ni de sangre. (Levítico 3, 16)

  • El sacerdote pondrá parte de la sangre en los cuernos del altar del incienso aromático ante Yahveh en la Tienda del Encuentro, y verterá toda la sangre del novillo al pie del altar de los holocaustos que se encuentra a la entrada de la Tienda del Encuentro. (Levítico 4, 7)

  • todo como lo reservado del novillo del sacrificio de comunión - y el sacerdote lo quemará sobre el altar de los holocaustos. (Levítico 4, 10)

  • Pondrá parte de la sangre en los cuernos del altar que se halla ante Yahveh en la Tienda del Encuentro, y derramará el resto de la sangre al pie del altar de los holocaustos, situado a la entrada de la Tienda del Encuentro. (Levítico 4, 18)

  • Reservará todo el sebo del novillo y lo quemará en el altar, (Levítico 4, 19)

  • El sacerdote mojará su dedo en la sangre de la víctima, untará los cuernos del altar de los holocaustos y derramará la sangre al pie del altar de los holocaustos. (Levítico 4, 25)

  • Quemará todo el sebo en el altar como el sebo del sacrificio de comunión. El sacerdote hará así la expiación por él, por su pecado, y se le perdonará. (Levítico 4, 26)

  • El sacerdote mojará su dedo en la sangre, untará los cuernos del altar de los holocaustos, y derramará toda la sangre al pie del altar. (Levítico 4, 30)

  • Separará todo el sebo de la víctima, como se separa el sebo de un sacrificio de comunión, y el sacerdote lo quemará en el altar como calmante aroma para Yahveh. El sacerdote hará así expiación por él y se le perdonará. (Levítico 4, 31)

  • El sacerdote mojará su dedo en la sangre de la víctima y untará los cuernos del altar de los holocaustos, y derramará toda la sangre al pie del mismo altar. (Levítico 4, 34)


“Leve Deus aos doente; valera’ mais do que qualquer tratamento!” São Padre Pio de Pietrelcina