Löydetty 1056 Tulokset: palabra de Cristo
saluda a Timoteo, su verdadero hijo en la fe. Te deseo la gracia, la misericordia y la paz que proceden de Dios Padre y de Cristo Jesús, nuestro Señor. (I Timoteo 1, 2)
los impúdicos y pervertidos, los traficantes de seres humanos, los tramposos y los perjuros. En una palabra, la Ley está contra todo lo que se opone a la sana doctrina (I Timoteo 1, 10)
Y sobreabundó en mí la gracia de nuestro Señor, junto con la fe y el amor de Cristo Jesús. (I Timoteo 1, 14)
De la misma manera, los diáconos deben ser hombres respetables, de una sola palabra, moderados en el uso del vino y enemigos de ganancias deshonestas. (I Timoteo 3, 8)
porque la Palabra de Dios y la oración lo santifican. (I Timoteo 4, 5)
Si explicas todo esto a los hermanos, serás un buen servidor de Cristo Jesús, alimentado por las enseñanzas de la fe y de la buena doctrina que siempre seguiste fielmente. (I Timoteo 4, 6)
No inscribas, en cambio, a las viudas más jóvenes, porque cuando los deseos puramente humanos prevalecen sobre su entrega a Cristo, quieren casarse otra vez, (I Timoteo 5, 11)
Yo te ordeno delante de Dios, que da vida a todas las cosas, y delante de Cristo Jesús, que dio buen testimonio ante Poncio Pilato: (I Timoteo 6, 13)
Pablo, Apóstol de Jesucristo, por la voluntad de Dios, para anunciar la promesa de Vida que está en Cristo Jesús, (II Timoteo 1, 1)
Él nos salvó y nos eligió con su santo llamado, no por nuestras obras, sino por su propia iniciativa y por la gracia: esa gracia que nos concedió en Cristo Jesús, desde toda la eternidad, (II Timoteo 1, 9)
Toma como norma las saludables lecciones de fe y de amor a Cristo Jesús que has escuchado de mí. (II Timoteo 1, 13)
Tú, que eres mi hijo, fortalécete con la gracia de Cristo Jesús. (II Timoteo 2, 1)