Löydetty 42 Tulokset: muros
Luego disolvió a la multitud para que cada uno regresara a su puesto: los hombres se dirigieron a los muros y a las torres de la ciudad, pero a las mujeres y a los niños los envió a sus casas. Mientras tanto, la ciudad quedó sumida en una profunda consternación. (Judit 7, 32)
Trata bien a Sión, Señor, por tu bondad; reconstruye los muros de Jerusalén. (Salmos 51, 20)
rondando día y noche por sus muros. Dentro de ella hay maldad y opresión, (Salmos 55, 11)
¡Haya paz en tus muros y seguridad en tus palacios!". (Salmos 122, 7)
Que nuestros bueyes estén bien cargados, que no haya brechas ni aberturas en los muros ni gritos de angustia en nuestras plazas. (Salmos 144, 14)
Luego reunió a todos los hombres aptos para la guerra, se apresuró a terminar los muros de Jerusalén y fortificó todo su contorno. (I Macabeos 13, 10)
Simón puso en ella soldados judíos, la fortificó para seguridad del país y de la ciudad, y elevó los muros de Jerusalén. (I Macabeos 14, 37)
las mujeres, ceñidas de cilicio debajo de los senos, se aglomeraban en las calles; las más jóvenes, habitualmente recluidas, corrían, unas a las puertas, otras a los muros, y otras, se asomaban por las ventanas. (II Macabeos 3, 19)
busca albergue cerca de su casa y clava una estaca en sus muros; (Eclesiástico 14, 24)
El hombre que peca contra su propio lecho dice en su corazón: "¿Quién me ve? La oscuridad me rodea y los muros me cubren; nadie me ve: ¿qué puedo temer? El Altísimo no se acordará de mis pecados". (Eclesiástico 23, 18)
Ezequías fortificó su ciudad e hizo llegar el agua dentro de sus muros, con el hierro horadó la roca y construyó cisternas para las aguas. (Eclesiástico 48, 17)
También es grande el recuerdo de Nehemías: él fue quien levantó nuestros muros en ruinas, el que puso puertas y cerrojos y reconstruyó nuestras casas. (Eclesiástico 49, 13)