Löydetty 43 Tulokset: Guibeá

  • Ha Caín, Guibeá y Timná: en total, diez ciudades con sus poblados. (Josué 15, 57)

  • Selá, Elef, Jerusalén -la ciudad jebusea- Guibeá y Quiriat: en total, catorce ciudades con sus poblados. Esta fue la herencia que recibieron los clanes de la tribu de Benjamín. (Josué 18, 28)

  • También murió Eleazar, hijo de Aarón, y lo enterraron en Guibeá, ciudad situada en la montaña de Efraím, que había sido entregada a su hijo Pinjás. (Josué 24, 33)

  • Pero su señor le respondió: "No nos apartemos para entrar en una ciudad extranjera, que no pertenece a los israelitas. Sigamos de largo hasta Guibeá". (Jueces 19, 12)

  • Luego dijo a su servidor: "Vamos a acercarnos a uno de esos poblados; pasaremos la noche en Guibeá o en Ramá". (Jueces 19, 13)

  • Siguieron de largo, y a la puesta del sol estuvieron frente en Guibeá de Benjamín. (Jueces 19, 14)

  • Entonces se apartaron del camino para ir a pasar la noche en Guibeá. Al llegar, el hombre se quedó en la plaza de la ciudad, pero nadie los invitó a su casa para pasar la noche. (Jueces 19, 15)

  • Entonces llegó un anciano, que al atardecer volvía de trabajar en el campo. Era un hombre de la montaña de Efraím y residía en Guibeá como forastero, porque la gente del lugar era benjaminita. (Jueces 19, 16)

  • Entonces el levita, el marido de la mujer asesinada, tomó la palabra y dijo: "Yo y mi concubina llegamos a Guibeá de Benjamín para pasar la noche, (Jueces 20, 4)

  • y los vecinos de Guibeá se levantaron contra mí: durante la noche, rodearon la casa, intentaron matarme y abusaron de mi concubina hasta hacerla morir. (Jueces 20, 5)

  • Y con Guibeá haremos lo siguiente: sortearemos a los que subirán a atacarla; (Jueces 20, 9)

  • de entre todas las tribus de Israel, tomaremos a diez hombres de cada cien, a cien de cada mil, y a mil de cada diez mil. Ellos recogerán víveres para la tropa, es decir, para los que irán a dar su merecido a Guibeá de Benjamín por la infamia que ha cometido en Israel". (Jueces 20, 10)


“Quanto maiores forem os dons, maior deve ser sua humildade, lembrando de que tudo lhe foi dado como empréstimo.”(Pe Pio) São Padre Pio de Pietrelcina