Löydetty 82 Tulokset: Manto
Si alguien te hace un pleito por la camisa, entrégale también el manto. (Evangelio según San Mateo 5, 40)
Mientras iba de camino, una mujer que desde hacía doce años padecía hemorragias, se acercó por detrás y tocó el fleco de su manto. (Evangelio según San Mateo 9, 20)
Pues ella pensaba: «Con sólo tocar su manto, me salvaré.» (Evangelio según San Mateo 9, 21)
Le rogaban que los dejara tocar al menos el fleco de su manto, y todos los que lo tocaron quedaron totalmente sanos. (Evangelio según San Mateo 14, 36)
Todo lo hacen para ser vistos por los hombres. Miren esas largas citas de la Ley que llevan en la frente, y los largos flecos de su manto. (Evangelio según San Mateo 23, 5)
Si te hallas en el campo, no vuelvas a buscar tu manto. (Evangelio según San Mateo 24, 18)
Además de la piel que tenía colgada de la cintura, Juan no llevaba más que un manto hecho de pelo de camello. Su comida eran langostas y miel silvestre. (Evangelio según San Marcos 1, 6)
Como había oído lo que se decía de Jesús, se acercó por detrás entre la gente y le tocó el manto. (Evangelio según San Marcos 5, 27)
que llevaran calzado corriente y un solo manto. (Evangelio según San Marcos 6, 9)
y en todos los lugares adonde iba, pueblos, ciudades o aldeas, ponían a los enfermos en las plazas y le rogaban que les dejara tocar al menos el fleco de su manto. Y todos los que lo tocaban quedaban sanos. (Evangelio según San Marcos 6, 56)
Y él, arrojando su manto, se puso en pie de un salto y se acercó a Jesús. (Evangelio según San Marcos 10, 50)
Al que te golpea en una mejilla, preséntale también la otra. Al que te arrebata el manto, entrégale también el vestido. (Evangelio según San Lucas 6, 29)
