Found 1100 Results for: Vio

  • Judá lo reconoció y dijo: «Ella tiene más razón que yo, porque la verdad es que no la he dado por mujer a mi hijo Selá.» Y nunca más volvió a tener trato con ella. (Génesis 38, 26)

  • Vio el jefe panaderos que era buena la interpretación y dijo a José: «Voy con mi sueño: Había tres cestas de pan candeal sobre mi cabeza. (Génesis 40, 16)

  • Al jefe de escanciadores le restituyó en su oficio, y volvió a poner la copa en manos de Faraón. (Génesis 40, 21)

  • Aquella mañana estaba inquieto su espíritu y envió a llamar a todos los magos y a todos los sabios de Egipto. Faraón les contó su sueño, pero no hubo quien se lo interpretara a Faraón. (Génesis 41, 8)

  • Vio Jacob que se repartía grano en Egipto, y dijo Jacob a sus hijos: «¿Por qué os estáis ahí mirando? (Génesis 42, 1)

  • pero a Benjamín, hermano de José, no le envió Jacob con sus hermanos, pues se decía: «No vaya a sucederle alguna desgracia.» (Génesis 42, 4)

  • Vio José a sus hermanos y los reconoció, pero él no se dio a conocer, y hablándoles con dureza les dijo: «¿De dónde venís?» Dijeron: «De Canaán, para comprar viveres.» (Génesis 42, 7)

  • Al ir a hacer noche, uno de ellos abrió su talega para dar pienso a su burro, y vio que su dinero estaba en la boca de la talega de grano. (Génesis 42, 27)

  • José vio con ellos a Benjamin, y dijo a su mayordomo: «Lleva a esos hombres a casa, mata algún animal y lo preparas, porque esos hombres van a comer conmigo a mediodía.» (Génesis 43, 16)

  • Entonces José volvió los ojos y vio a Benjamín, su hermano de madre, y dijo: «¿Este es vuestro hermano menor, de quien me hablasteis?» Y añadió: «Dios te guarde, hijo mío.» (Génesis 43, 29)

  • Ahora bien, no os pese mal, ni os dé enojo el haberme vendido acá, pues para salvar vidas me envió Dios delante de vosotros. (Génesis 45, 5)

  • A su padre le envió asimismo diez burros cargados de lo mejor de Egipto y diez asnas cargadas de trigo, pan y víveres para el viaje de su padre. (Génesis 45, 23)


“Se precisamos ter paciência para suportar os defeitos dos outros, quanto mais ainda precisamos para tolerar nossos próprios defeitos!” São Padre Pio de Pietrelcina