Gefunden 267 Ergebnisse für: guerra espiritual

  • Desde los días de Guibeá, has pecado, Israel, ¡allí se han plantado! ¿No los alcanzará en Guibeá la guerra, a los hijos de la injusticia? (Oseas 10, 9)

  • tumulto de guerra se alzará en tu pueblo, y todas tus fortalezas serán devastadas, como Salmán devastó a Bet Arbel el día de la batalla, cuando la madre fue estrellada sobre sus hijos. (Oseas 10, 14)

  • Publicad esto entre las naciones: ¡Proclamad la guerra, incitad a los bravos! ¡Que avancen y suban todos los hombres de guerra! (Joel 4, 9)

  • Visión de Abdías. Así dice el Señor Yahveh a Edom: Una nueva he oído de parte de Yahveh, un mensajero ha sido enviado entre las naciones: «¡En pie, levantémonos contra él en guerra!» (Abdías 1, 1)

  • Sois vosotros los que contra mi pueblo como enemigos os alzáis. Al irreprochable le arrancáis el manto; al que pasa confiado le infligís los desastres de la guerra. (Miqueas 2, 8)

  • Así dice Yahveh contra los profetas que extravían a mi pueblo, los que, mientras mascan con sus dientes, gritan: «¡Paz!», mas a quien no pone nada en su boca le declaran guerra santa. (Miqueas 3, 5)

  • El juzgará entre pueblos numerosos, y corregirá a naciones poderosas; forjarán ellas sus espadas en azadones, y sus lanzas en podaderas. No blandirá más la espada nación contra nación, ni se adiestrarán más para la guerra. (Miqueas 4, 3)

  • Y ésta será la plaga con que herirá Yahveh a todos los pueblos que hayan hecho la guerra a Jerusalén: pudrirá su carne estando ellos todavía en pie, sus ojos se pudrirán en sus cuencas, y su lengua se pudrirá en su boca. (Zacarías 14, 12)

  • pues ansío veros, a fin de comunicaros algún don espiritual que os fortalezca, (Romanos 1, 11)

  • Sabemos, en efecto, que la ley es espiritual, mas yo soy de carne, vendido al poder del pecado. (Romanos 7, 14)

  • Efectivamente, los que viven según la carne, desean lo carnal; mas los que viven según el espíritu, lo espiritual. (Romanos 8, 5)

  • Os exhorto, pues, hermanos, por la misericordia de Dios, que ofrezcáis vuestros cuerpos como una víctima viva, santa, agradable a Dios: tal será vuestro culto espiritual. (Romanos 12, 1)


“Se precisamos ter paciência para suportar os defeitos dos outros, quanto mais ainda precisamos para tolerar nossos próprios defeitos!” São Padre Pio de Pietrelcina