Gefunden 1682 Ergebnisse für: Jesús convierte agua en vino
Jesús lo fue con un juramento, el de aquel que le dijo: Juró el Señor y no se arrepentirá: Tú eres sacerdote para siempre. (Hebreos 7, 21)
Por lo tanto, Jesús ha llegado a ser el garante de una Alianza superior. (Hebreos 7, 22)
pero Jesús, como permanece para siempre, posee un sacerdocio inmutable. (Hebreos 7, 24)
Si Jesús estuviera en la tierra, no podría ser sacerdote, porque ya hay aquí otros sacerdotes que presentan las ofrendas de acuerdo con la Ley. (Hebreos 8, 4)
Efectivamente, cuando Moisés promulgó delante de todo el pueblo cada uno de los mandamientos escritos en la Ley, tomó la sangre de novillos y chivos -junto con el agua, la lana escarlata y el hisopo- y roció el Libro y también a todo el pueblo, (Hebreos 9, 19)
Por lo tanto, hermanos, tenemos plena seguridad de que podemos entrar en el Santuario por la sangre de Jesús, (Hebreos 10, 19)
Acerquémonos, entonces, con un corazón sincero y llenos de fe, purificados interiormente de toda mala conciencia y con el cuerpo lavado por el agua pura. (Hebreos 10, 22)
Fijemos la mirada en el iniciador y consumador de nuestra fe, en Jesús, el cual, en lugar del gozo que se le ofrecía, soportó la cruz sin tener en cuenta la infamia, y ahora está sentado a la derechadel trono de Dios. (Hebreos 12, 2)
a Jesús, el mediador de la Nueva Alianza, y a la sangre purificadora que habla más elocuentemente que la de Abel. (Hebreos 12, 24)
Por eso Jesús, para santificar al pueblo con su sangre, padeció fuera de las puertas de la ciudad. (Hebreos 13, 12)
¿Acaso brota el agua dulce y la amarga de una misma fuente? (Santiago 3, 11)
¿Acaso, hermanos, una higuera puede producir aceitunas, o higos una vid? Tampoco el mar puede producir agua dulce. (Santiago 3, 12)